La banda que se quedó a pasar el apagón (especialmente yo) comenzamos con una sesión acústica de guitarra y batería a la luz de las velas. De repronto (palabra que indica sorpresa y rapidez ) llega la electricidad en lo más prendido de la noche y la banda se conecta (a este tipo de energía) y nos regala una noche eléctrica, prendida, energizante, viva.
Finalmente Igor hizo unas ricas mezclas que la respetable danzó hasta que sus bocinas tronaron.
Los que estuvimos hasta el final pudimos irnos a casa con más luz en el cuerpo que cualquier lugar del mundo.





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